¿Cómo está la economía de Cusco?
De acuerdo a la Oficina Nacional de Investigación Económica, desde mediados de la década de 1850, se han generado más de 32 recesiones de la economía. ¿la economía peruana está en recesión?; según expertos en economía, la respuesta es afirmativa, debido a que no está creciendo, el producto bruto interno (PBI) sorpresivamente en el mes de julio sufrió una reducción de 1.30%, en el mes de agosto otra vez se ha registrado un -0,63%, a pesar de las declaraciones previas del ministro de economía y finanzas Alex Contreras que proyectaba un resultado positivo; esto es preocupante porque por cada punto de disminución del crecimiento de la producción se reducen 150,000 puestos de empleo; el Banco Central de Reserva del Perú ha anunciado que la inversión minera caerá en 18% este año, que la inversión privada será 4.6% menor el 2023, que a la inversión pública le está pasando la factura del primer año de gestión de aprendizaje ya que para el primer semestre ha bajado en 13% respecto al año 2022; la captación de los impuestos se han reducido a agosto en -12%, y el IGV este año se proyecta recaudar hasta en 8% menos que en el 2022; gracias a esta forma de política tributaria de exoneración, evasión y elusión, el déficit fiscal se proyecta hasta en 2.6% a fin de año, por encima del ratio exigido legalmente hasta un máximo de 2.4%
Complementariamente al escenario descrito de la economía del país, se aprecia un escenario de incertidumbre y de riesgos globales como la prolongada guerra entre Rusia – Ucrania, el enfriamiento de la economía de nuestro socio principal China, elevado precio de los commodities, elevada inflación y desastres naturales como el fenómeno el Niño que impacta fuertemente en nuestra economía.
El Instituto Nacional de Estadística e Informática (INEI) ha preparado el informe técnico N° 3 a setiembre 2023 de los seis primeros meses de comportamiento de la actividad económica por departamentos. El informe resume que son trece los departamentos que han disminuido su nivel de producción respecto a junio del 2022; Puno es la región con mayor recesión porque su producción ha disminuido hasta en -13.4%, Tumbes -9.2% y Lambayeque -5.3%, pero también se aprecia que son once las regiones que han registrado un incremento en la producción variando de 0.2% (Madre de Dios) a 42.9% (Apurímac) y 49.2% (Moquegua).
La economía del departamento de Cusco ha logrado ubicarse en el grupo privilegiado de economías regionales con crecimiento económico positivo en el quinto lugar con un 2% de crecimiento respecto al primer semestre del 2022, sustentado en el sector minería e hidrocarburos y basado en un resultado positivo del subsector minero que reportó un mayor nivel de producción tanto de cobre como de oro en la Compañía minera de Antapaccay en Espinar y molibdeno en la empresa minera de Hudbay Perú provincia de Chumbivilcas. El sector minero e hidrocarburos es la actividad económica más importante del departamento de Cusco, puesto que contribuye al PBI con el 45.43%; absorbe el 1,2% de la PEA regional y con nivel de informalidad del empleo de hasta el 53.2%; en el subsector hidrocarburos se aprecia una disminución de la producción de líquidos de gas natural, pese al incremento en la producción de gas natural, sin embargo los cusqueños aún seguimos pendientes a la masificación del gas natural y la disminución del precio de este apreciado recurso, que permita mejorar sus niveles de vida.
Si bien es cierto que el sector agropecuario es importante en la generación de empleo, puesto que demanda el 43.5% de la PEA, genera apenas el 4.75% del PBI de la región de Cusco y con grado de informalidad de empleo del 99.9%. Al segundo trimestre del 2023 disminuye la producción agropecuaria en -8.6%, por el menor nivel de producción en papa, maíz amiláceo, olluco y quinua, asociada a la escasez de lluvias en la sierra peruana. Igual comportamiento se aprecia en el subsector pecuario en cuanto a la producción de vacunos, alpaca y ovino.
El sector construcción registra al segundo trimestre un comportamiento positivo de 14.3% de crecimiento económico, sustentado en el considerable presupuesto de gasto de inversión tanto del gobierno regional y cuanto los 117 gobiernos locales de la región que han emprendido la ejecución de los proyectos de infraestructura de transportes como el mejoramiento del camino vecinal en el distrito de Colquemarca; la carretera Santa María Santa Teresa – Puente Hidroeléctrica Machu Picchu, entre otros proyectos.
En resumen: durante el segundo trimestre de 2023, la producción de la región de Cusco se incrementa en 2.0% sustentado en el sector construcción (14.3%), minería e hidrocarburos (4.8%) y generando el 45.43% del PBI, administración y defensa (4.5%), comercio (2.7%) y transporte almacenamiento, correo y mensajería (1,5%); sin embargo se redujeron la producción de los sectores agropecuario (-8.6%) que absorbe el 43.5% de la PEA, telecomunicaciones y otros servicios de información (-6.5%) y electricidad, gas y agua (-1.8%).
Entonces en este escenario, la pregunta es: ¿qué se puede hacer para lograr el bienestar económico de la población?, en el corto y mediano plazos pareciera muy difícil por no decir imposible alcanzar los objetivos económicos o resolver todos los problemas económicos que nos aquejan. La propuesta de medidas se puede dividir en dos tipos que son complementarios, medidas de corto y largo plazo. Dada la extensión del artículo no se desarrollará las medidas de largo plazo sino únicamente las de corto plazo y esto significa reactivar la demanda mediante una política fiscal expansiva basado fundamentalmente en mecanismos de aumento del gasto público (fundamentalmente el presupuesto de gasto de inversión) y la reducción de los impuestos. En este marco propongo propositivamente las siguientes ideas que apuntan a reactivar la economía de la región del Cusco que se encuentra en un franco proceso de recesión:
El sector agropecuario, tiene el mayor potencial en Cusco, porque genera el 45% del empleo; aunque, la tasa de informalidad es del 99.9% y su productividad es 9.5 veces menor que la región de Ica, se requiere de manera urgente garantizar la campaña agrícola 2023-2024; para ello no es suficiente medidas lineales tipo PROCOMPITE, sino políticas enmarcadas en la segunda reforma agraria, como: La promoción de la asociatividad para la productividad e inserción exitosa al mercado, proyectos de riego, siembra y cosecha de agua con micro reservorios, servicio civil del sector agrario, que movilice a los egresados de carreras agrarias para brindar asistencia técnica y capacitación a comunidades, industrialización rural para inyectar de mayor valor agregado, compras estatales a la pequeña agricultura, vía comedores populares, programas sociales, ollas comunes, desarrollo del sector ganadero mediante el repoblamiento ganadero, mejora de pastos y genético para lograr mayor producción de carne, leche y demás derivados y acceso a crédito desde un banco de fomento agrario.
Cusco tiene que continuar aprovechando su gran potencial minero y gasífero, la minería genera el 45.43% del PBI regional, se debe generar las condiciones para el inicio de la explotación de los proyectos Coroccohuayco en Espinar y Quechua en Chumbivilcas; tienen que mejorarse las cadenas de valor en la minería, mediante la extracción adecuada de materia prima, la mejora de las condiciones laborales de los mineros, garantizar el cumplimiento de las normas ambientales, la reducción del consumo de agua, un dialogo coordinado con las partes interesadas puede conducir a la creación de cadenas de valor sostenibles en la minería. En cuanto al gas, proyectos como el Gasoducto Sur Peruano el mismo que se encuentra paralizado desde el 2017, la obra registraba un avance de 36% y una inversión aproximada de 1,500 millones de dólares y la masificación siete regiones, sin avance, deben reiniciarse para la reactivación de la economía regional.
Del diagnóstico y la información presentada por el INEI, se deduce que el sector construcción es un potencial para la economía de la región de Cusco, puesto que ha registrado el mayor crecimiento 14.3%, justificado por dos aspectos: La ingente cantidad de recursos presupuestales recibido por los gobiernos locales y regional que son altamente adictos a la inversión en construcción y el hecho de ser Cusco uno de las maravillas más importantes del mundo el mismo que ha alentado la actividad de la construcción. Que incluso ameritaría la construcción de una fábrica de cemento en Cusco, como una forma de reducir el costo de la materia prima directa para la construcción.
Para la reactivación de la economía de Cusco, es clave el desarrollo de actividad turística, por su incomparable oferta turística, para ello se debe aprovechar sus encadenamientos con otros sectores, la diversificación de la actividad turística, en el corto plazo una buena meta debe ser recuperar la cantidad de turistas que arribaron a Cusco en el año 2019 (2,197,002) y para el mediano plazo por lo menos duplicar.
Se debe impulsar a los otros sectores de la actividad económica como el comercio, servicios, transporte, almacenamiento correo y mensajería, labores involucradas con el quehacer de la población urbana donde se asienta el segmento pobre, mediante políticas que permitan mejorar la oferta con la concesión de financiamiento en condiciones favorables a las micro y pequeñas empresas rurales, por ejemplo en el turismo existe más de 8,800 guías de turismo, 2,400 agencias de viaje y más de 115,000 dependen de manera directa e indirecta del turismo, pero son 12% menor que en 2019.
Sin una política firme de financiamiento todo lo propuesto es imposible, felizmente la región Cusco cuenta con los recursos presupuestales suficientes (canon, sobrecanon, regalías, recursos ordinarios, recursos directamente recaudados, endeudamiento y donaciones y transferencias), según el Ministerio de Economía y Finanzas solo el presupuesto de inversión pública en Cusco, para el año 2022 ha alcanzado a 6,431 millones de soles, distribuidos en los diferentes niveles de gobierno: nacional, regional y locales. Sin embargo, en este punto es importante plantear algunas cuestiones que permitan ejecutar eficiente y eficazmente. En primer lugar poner en marcha las obras públicas paralizadas en Cusco que a junio del 2023 llegaban a 293 proyectos, por un valor de 1,761 millones; desterrar progresivamente la atomización de proyectos por parte del Gobierno Regional de Cusco que llegó a ejecutar simultáneamente hasta más de 500 proyectos en un ejercicio presupuestal anual; mejorar la capacidad de gestión de las finanzas públicas, sobre todo en el ratio eficacia presupuestal ya que entre enero a julio del 2023 apenas se logró un avance de ejecución del 24.6% en el caso del Gobierno Regional de Cusco y a nivel de los 117 Gobiernos Locales 33.3% en cuanto al presupuesto de gasto de inversión (no considera el presupuesto de gasto corriente y el presupuesto de servicio de la deuda); el problema de la ejecución del presupuesto de inversión y los proyectos de inversión es la baja capacidad de gestión, esto se debe superar con una fuerte dosis de capacitación a las autoridades y ejecutivos de los gobiernos locales y regional.
En resumen: La propuesta apunta además de la reactivación económica, progresivamente cerrar algunas brechas pendientes, como la brecha en saneamiento (5,302 millones); electrificación rural (474 millones); pavimentación de la red nacional de Cusco (1,608 millones); en Cusco el 69% de los colegios sin servicios básicos, 42% sin secundaria completa y 87 % trabajadores con empleo informal.